Hoy en día, la popularidad de la estufa de pellets está aumentando en los hogares. La eficacia y rentabilidad de estos equipos, capaces de funcionar como equipo principal de calefacción o como complemento de un sistema existente, han seducido a la mayoría de los consumidores. Hagamos un balance de estos innovadores aparatos.
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Cómo funciona una estufa de pellets
El principio de funcionamiento de este tipo de dispositivos no es difícil de asimilar. Se trata de un sistema de calefacción, a menudo autónomo, que no requiere una conexión con su dispositivo principal.
Dispone de un depósito que puede contener pellets de madera o pellets. Los modelos automatizados constan de un mecanismo de barrena que asegura que el combustible llegue al compartimento destinado a prender fuego. La ventaja decisiva de este tipo de estufa es su rentabilidad gracias al fenómeno de la llama constante.
En la mayoría de los casos, estos dispositivos requieren una conexión a la red eléctrica. Sin embargo, hay que tener en cuenta que su consumo anual es menor. No tienes que preocuparte por tu factura a final de mes.
Existen tres categorías principales de este tipo de dispositivos en el mercado. Los ejemplares más populares entre los compradores son los que funcionan por convección natural para garantizar la difusión del calor por toda la habitación. También hay aparatos que utilizan la convección forzada.
Deben incluir un ventilador. Una vez que el ventilador se enciende, distribuye el nivel de calor seleccionado por toda la habitación.
Si tiene varias habitaciones para beneficiarse de esta intensidad de calor, sólo tiene que recurrir a las llamadas estufas «canalizables». Están equipados con conductos de transferencia que redirigen el aire caliente a un lugar específico.
Consumo a costa de la energía
En un contexto generalizado, los especialistas han desarrollado una teoría en la que afirman que el consumo de pellets de una estufa estaría dentro de 1 kg para una hora de funcionamiento continuo. Si ampliamos los cálculos, el consumo rondaría las 2 toneladas durante el periodo invernal.
El precio de un saco de pellets varía según los fabricantes, pero si se toma un paquete de 15 kg que vale entre 3 y 4 euros, por ejemplo, se obtiene un coste del orden de 500 a 600 euros anuales. Cabe señalar que la conservación de este combustible sigue siendo relativamente fácil.
Basta con colocarlos en un recipiente hermético en un lugar relativamente alejado de los efectos de la humedad.
En cualquier caso, estas cifras se han introducido a modo de ejemplo. Es importante tener en cuenta que, aunque dos aparatos tengan un mecanismo de funcionamiento similar, no necesariamente consumirán la misma cantidad de pellets de distinta potencia y tecnología.
En este campo hay 3, entre los que se encuentran los sistemas de gestión lineal, binaria y de pasos de potencia. Los tres tienen sus propias especificidades, pero eligiendo la categoría adaptada a su modo de uso, podrá optimizar fácilmente su consumo de pellets.
Los diferentes ajustes a realizar en el dispositivo
Inicialmente, tras la compra de su dispositivo, lo recibirá con los ajustes por defecto, es decir, los ajustes de fábrica. Estas funcionalidades iniciales pretenden prevenir posibles averías. Sin embargo, debe saber que es posible optimizar el rendimiento de su equipo en el contexto de una reducción de su consumo.
Para empezar, puede proceder a ajustar la velocidad de entrada de aire. Se trata de nivelar el flujo de aire entrante en función de la calidad de los pellets que utilice y de la velocidad del viento. Se dará cuenta inmediatamente de este fenómeno cuando vea que los gránulos se dispersan por toda la cámara de combustión durante el funcionamiento.
Lo más probable es que este proceso provoque una parada anticipada de su unidad, ya que habrá podido controlar el ritmo de pandeo.
Y al mejorar el caudal de aire, obtendrá resultados satisfactorios en su consumo, una reducción de hasta el 10%. Aunque pierda la apariencia de las llamas brillantes que hacen que su estufa parezca una estufa, seguirá ahorrando dinero en su factura.
El mantenimiento de la temperatura de confort también está en la lista de métodos a aplicar para mantener la potencia óptima de su aparato. En este caso, el objetivo es proporcionar el nivel de calor que satisfaga sus expectativas evitando el consumo excesivo.
Tenga en cuenta que por encima de los 20°C, cada grado adicional provoca un sobreconsumo de pellets de alrededor del 7%.
¿Cómo puede reducir su consumo de pellets?
La fase inicial para reducir su consumo de combustible se basa principalmente en un cálculo de la potencia en función de las dimensiones de la habitación a calentar, especialmente si se trata de un nueva estufa de pellets en la que piensas invertir. La elección del mejor modelo debe seguir siendo su máxima prioridad. Asegúrese, sin embargo, de tener en cuenta los distintos elementos de selección que le permitirán realizar una compra adecuada, evitando al mismo tiempo la posibilidad de realizar una transacción decepcionante.
Sin embargo, la potencia por sí sola no determina la eficiencia de su equipo. Los parámetros de aislamiento de su vivienda también deben cumplir unas estrictas directrices y, en particular, la normativa RT2012. Cada rincón de su casa requiere una inspección completa, empezando por el techo, la pared o el suelo, para limitar la pérdida de calor y, en consecuencia, el consumo excesivo de sus equipos.
Para garantizar el funcionamiento óptimo de su equipo durante todo el año, no es posible saltarse los pasos de mantenimiento. En efecto, hay que realizar periódicamente unas tareas de limpieza, que no son obligatorias pero sí necesarias, y un mantenimiento anual que debe realizar un profesional.
No olvide que la eficiencia de su modelo también depende de la calidad de los pellets que utilice. Para adquirir los mejores ejemplares del mercado, deberá tener en cuenta criterios como la cantidad en el envase, la densidad, la durabilidad mecánica, el poder calorífico y los diferentes niveles de humedad y cenizas.
