Placas solares: lo que no te cuentan
Los placas solares son conocidos por sus múltiples cualidades, a saber, el respeto al medio ambiente, los recursos inagotables y la rentabilidad. Por ello, el número de generadores fotovoltaicos vendidos aumenta constantemente. Sin embargo, en el ámbito de las energías renovables no todo es de color de rosa, lo que a menudo se traduce en prácticas bastante deshonestas por parte de algunas empresas.
¿Dónde están las estafas?
Las estafas se manifiestan generalmente convenciendo a la gente de que los placas solares son gratis, pero también acentuando el autoconsumo. Por supuesto, producir la propia energía y utilizarla está bien, pero eso no significa que se cancele la factura de la luz. No significa que la factura de la luz se cancele, la ventaja de un placa solar es sólo la reducción de este último. Sin embargo, la compra de este tipo de fuente de energía requiere gastos de equipamiento e instalación, de ahí la falta de honestidad de algunas organizaciones.
También se menciona una amortización rápida y muy atractiva. Algunos incluso se atreven a mencionar un beneficio anual de 3.000 euros que se obtendrá de la comercialización de su electricidad. Sin embargo, esta información se ha confeccionado a partir de cero, ya que el precio de esta última ha bajado.
Otro ejemplo son las subvenciones concedidas por el Estado. Aunque esta institución tiene una política de fomento de las energías renovables, esto no significa que le vaya a salir gratis la placa. Además, la mayoría de los estafadores se presentarán como afiliados a las autoridades públicas y serán muy convincentes.
Y en cuanto a la financiación, también le informamos de que, digan lo que digan, los créditos al consumo que anunciarán tendrán un tipo de interés muy alto.
Los lugares de encuentro, como las distintas ferias, son también el coto de caza de estas empresas. Además, muchos de ellos le animan a firmar un documento en forma de simple presupuesto. Pero cuidado, este documento puede convertirse en una hoja de pedido difícil de revertir.
Por eso es necesario tener mucho cuidado en todo momento y evitar cualquier firma.
En cuanto a los métodos de aproximación, los estafadores suelen atreverse a tocar el timbre de su casa o a llamarle por teléfono. Por lo general, ponen el potencial de su casa por adelantado y le muestran un documento. Pero tenga cuidado, ya que este documento puede implicar un compromiso por su parte de instalar un panel fotovoltaico.
Otro método de estafa es proponer una instalación a ras de pared. Tenga en cuenta que un verdadero profesional no le ofrecerá automáticamente estas técnicas de instalación, ya que los paneles serán menos eficientes en comparación con una instalación en el techo.
De hecho, un panel correctamente instalado tendrá la capacidad de reducir la factura eléctrica en un 45%.
También hay otro caso en el que es el material propuesto el que es de mala calidad. Además, si no se tiene ninguna noción en este campo, es obvio que pasará tiempo antes de que se produzca esta situación.
En realidad, el desencadenante será el descenso del rendimiento de su panel porque producirá menos energía. Además, esto se notará en el importe de la factura de la luz, que tenderá a volver a su valor inicial.
Y si no es así, serán las habilidades del instalador las que se pongan en duda. De hecho, en la mayoría de los foros de discusión se han reportado muchos testimonios relacionados con sitios de construcción incompletos.
Para llegar al mayor número de personas posible, los estafadores no dudan en utilizar prensas conocidas. Por eso suelen aparecer en la sección de anuncios patrocinados.
No caigas en la trampa
Para no caer en la trampa, le aconsejamos que se informe en los foros de debate. De hecho, nada supera la opinión de los clientes anteriores. En segundo lugar, sin la presencia de un representante, evite firmar cualquier cosa, ya que la compra de un placa solar no se hace de la noche a la mañana y se trata de una suma bastante importante.
También es muy importante comparar los precios, ya que una gran diferencia en las tarifas es a veces un mal presagio. Y si alguna vez te han estafado, no dudes en publicar el nombre de la empresa en cuestión.
Describa cómo funcionaba la empresa y qué documentos tiene en su poder. Esto limitará aún más las estafas.