El agua es indispensable para la vida cotidiana de la humanidad. Es un factor importante para nuestra salud, nuestro bienestar y todo lo que nos rodea. Por ello, es importante prestar atención a su calidad. Si vive en una zona en la que el agua dura sale constantemente de los grifos, será su fontanería y sus electrodomésticos los que paguen el precio.
Entonces, ¿cómo se pueden conservar? ¿Qué puede hacer para evitarlo?
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¿Qué quiere decir con agua dura?
Por naturaleza, el agua puede ser más o menos dura, dependiendo de la región donde se viva, pero sobre todo de la estructura del suelo. También existe otro nombre para esta condición, como agua calcárea o calcárea. La razón es que en su composición hay mucho magnesio, pero también piedra caliza.
Esta «dureza» se mide en TH o «Título Hidrológico» y se expresa en °F (grado francés).
A menos de 10 °F, podemos considerar que el agua es blanda y que los iones responsables de los depósitos de sarro y residuos sólo tienen consecuencias menores en sus aparatos y en su salud. Entre 10 °F y 20 °F, se encuentra en el rango medio.
Esto puede incluso ayudarle con su ingesta diaria de calcio y magnesio. Cuando las cifras superan los 20°F, los componentes del agua contribuyen innegablemente a dañar su equipo.
Normalmente, sin un vaso de precipitados, este alto contenido de magnesio y calcio no puede verse a simple vista. Sin embargo, puede rastrear el fenómeno a través de señales en el funcionamiento de sus electrodomésticos que requieren el uso de agua, o en su ropa.
¿Cómo puede saber la dureza de su agua? Sólo tienes que ir a la web, a las tiendas de bricolaje o de jardinería para conseguir un kit de medición. El paquete suele contener frascos con reactivos y tiras reactivas.
El procedimiento es sencillo: se sumerge el accesorio en el líquido a probar. A continuación, basta con consultar una tabla de medición. También puede pedir a un profesional que lo haga por usted.
El impacto del agua dura en la vida cotidiana
Según los investigadores y científicos, los efectos del agua dura son menores en los seres humanos a pesar de su consumo diario. Puedes acabar con la piel seca o el pelo sin brillo. Por lo general, son los electrodomésticos y la fontanería de su casa los que serán objeto de daños.
El agua dura suele dejar depósitos de cal producidos por el calentamiento de su equipo. Estos residuos se depositan en los depósitos, los filtros y las tuberías, provocando una disminución del rendimiento o un aumento relativo del consumo eléctrico.
Esto se debe a una reducción de su eficiencia energética, y es probable que provoque un fallo total del dispositivo en cuestión si no se controla. Cuando se utiliza una lavadora, por ejemplo, se tiende a añadir más detergente porque la cal figura como agente limitador de la espuma.
Básicamente, el uso de agua dura afectará seriamente a su cartera. En efecto, tendrá una lista de materiales que comprar, como productos de descalcificación y otros, pero también, reparar o incluso sustituir algunos de sus equipos.
Las diferentes formas de tratar el agua dura
Los métodos más sencillos para tratar el agua dura no son caros. Basta con comprar bicarbonato de sodio y vinagre blanco para eliminar los depósitos de cal en el baño, la cocina y otros lugares con grifo.
También tiene a su disposición otra solución eficaz: puede comprar filtros anticalcáreos. En el mercado, encontrará dos tipos de este tipo de equipos: los dispositivos magnéticos y los electrónicos. Respectivamente, el primero se coloca alrededor de sus tuberías.
Su función es emitir una frecuencia para evitar la formación de incrustaciones. El segundo también tiene la misma finalidad, pero utiliza una corriente eléctrica como proceso de trabajo y se sitúa en la llegada del agua.
Sin embargo, se puede deducir que estos procesos no combaten la caliza en el origen y pueden ver potencialmente la acumulación de residuos en algunas zonas. Los especialistas recomiendan la instalación de un descalcificador. Esto es mucho más práctico que tener uno instalado en cada grifo o electrodoméstico que requiera agua.
El principio de funcionamiento de un ablandador de agua
Según los modelos que se pueden encontrar en la web, hay dos categorías principales de ablandadores. Por un lado, encontrará los clásicos ejemplares de resina. Cuando el agua pasa por ellos, se produce la sustitución de los iones de calcio por los de sodio.
Al eliminarlos, el agua recupera su estado «blando». La unidad se instala en la tubería central y, más concretamente, en el contador.
Por otro lado, se trata de los dispositivos de CO22. Utilizan el mismo principio de funcionamiento hasta el último detalle. No utilizan sodio y restauran la neutralidad del agua. Las personas que siguen una dieta sin sal probablemente estarán interesadas en este segundo tipo de equipos.
¿Cómo elegir un descalcificador?
Equipa tu casa con un descalcificador de agua no es algo que deba tomarse a la ligera. Se trata de una inversión a largo plazo, por lo que es esencial elegir el dispositivo tras considerar cuidadosamente algunos parámetros.
La primera que no debes dejar de lado es la selección de tu tipo de equipo. En el mercado encontrará probetas manuales, automáticas, semiautomáticas y dispositivos con sensores de dureza. Difieren en la forma de tratarlos, pero cada uno cumple su función de forma brillante.
También se recomienda elegir un modelo con un volumen de resina que se ajuste a la dureza del agua y al número de ocupantes de su hogar. Se considera que estos últimos tienen un acceso regular al agua, pero también al equipo que se va a suministrar.
El modo de instalación debe estar en relación con el espacio del que dispone. En general, encontrará máquinas monobloque por la sencillez de su manejo y el ahorro de espacio, y bi-bloques, que son fáciles de mover y de limpiar el depósito de resina.
